SHAKESPEARE-BRITTEN, TEATRO EN MÚSICA Teatro Colón, Libertad 621. Domingo 2 de Julio, 17.00
A midsummer night's dream, primer acto, Teatro Colón 2006
A MIDSUMMER NIGHT´S DREAM (Sueño de una noche de verano), ópera en tres actos de Benjamin Britten. Dirección musical: Arthur Fagen. Puesta en escena: Paul-Emile Fourny. Escenografía e iluminación: Louis Desiré. Iluminación: Patrick Méeüs. Dirección del Coro de niños: Valdo Sciamarella. Reparto: Fabrice di Falco (Oberon), Pamela Coburn (Tytania), Gary Tushaw (Puck), Luis Gaeta (Theseus), Alejandra Malvino (Hippolyta), Jonathan Boyd (Lysander), Luciano Garay (Demetrius), Mariana Rewerski (Hermia), Graciela Oddone (Helena), Gustavo Gibert (Bottom), Carlos Esquivel (Quince), Ricardo Casinelli (Flute), Sergio Gómez (Snug), Osvaldo Peroni (Snout), Sebastián Sorarrain (Starveling). Orquesta Estable del Teatro Colón. Coro de Niños del Teatro Colón.
Basada en la obra homónima de William Shakespeare, A midsummer night´s dream –o en su traducción al español Sueño de una noche de verano– es una de esas óperas en las que la utópica fusión entre música y texto logran su cometido. La adaptación del libreto hecha por el mismo Benjamin Britten con Peter Pears respetó la esencia de la obra, aunque fuera reducida. Situada en el mágico bosque de Atenas en una noche de verano, esta comedia narra el ambiente de “ensueño” que transitan los personajes entremezclándose con lo mágico, lo amoroso y lo mundano.
La creación musical de Britten en esta obra logra momentos excelsos. La caracterización que ofrece para cada personaje, el tratamiento orquestal, la multiplicidad de recursos tímbricos, garantizan un espectáculo en el cual la teatralidad ofrecida por la música, sitúa a esta obra como uno de los títulos más relevantes del repertorio operístico del siglo XX.
Pamela Coburn (Tytania) y Gustavo Gibert (Bottom) en el segundo acto de A midsummer night's dream, Teatro Colón 2006
La única versión ofrecida en el Teatro Colón data de 1962, a sólo dos años del estreno mundial de la obra. En esta oportunidad la dirección musical estuvo a cargo de Arthur Fagen, quien condujo en forma precisa y plena de matices a una convincente Orquesta Estable. La puesta en escena de Paul-Emile Fourny planteó una propuesta con elementos simbólicos, sustentada en un atrayente juego de iluminación que propició la atmósfera de lo “mágico”. El lucimiento actoral benefició a esta concepción y a la dinámica con que se planteó la acción. Asimismo la escenografía contribuyó en la belleza de carácter contemplativo que adquirió la estética del espectáculo.
La cuidada selección con que contó este reparto confluyó en una característica común a todos los intérpretes: homogeneidad actoral. En líneas generales, la interpretación funcionó en el mecanismo propuesto por la régie. De los artistas locales cabe mencionar la labor sólida de la soprano Graciela Oddone quien vuelve a mostrar su soltura y una actitud corporal de jerárquico nivel. Tanto Luciano Garay, Mariana Rewerski y en particular Ricardo Casinelli –quien mostró una inusitada vena cómica en su composición de Flute– lucieron un desempeño de logrado nivel. De los intérpretes extranjeros se destacó la voz del tenor Jonathan Boyd por su claridad y seguridad en la emisión. La pareja protagónica del mundo de las Hadas fue encarnada por el contratenor Fabrice di Falco y la soprano Pamela Coburn quienes se desempeñaron correctamente desde lo vocal.
A midsummer night's dream, tercer acto, Teatro Colón 2006.
De este modo –como lo hiciera en 2004 con Muerte en Venecia– Benjamin Britten vuelve a tener crédito en la sala principal del Teatro Colón, esta vez para recrear de la mano de Shakespeare la deliciosa comedia donde conviven lo mágico y lo burlesco en esta ópera de mediados del siglo XX, verdadero teatro en música.
Javier Villa
Imágenes gentileza Teatro Colón. Fotografías de Miguel Micciche y Máximo Parpagnoli, Departamento Fotofilmación.
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