Escena del primer acto de Don Carlo, Teatro Colón, 2015
DON CARLO, ópera de Giuseppe Verdi. Función del sábado 26 de septiembre de 2015 en el Teatro Colón. Dirección musical: Ira Levin. Dirección escénica, escenografía y vestuario: Eugenio Zanetti. Iluminación: Eli Sirlin. Elenco: Tamar Iveri (Isabel de Valois), Béatrice Uria Monzon (La Princesa de Éboli), Rocío Giordano (Tebaldo), Alexander Vinogradov (Felipe II), José Bros (Don Carlos), Fabián Veloz (Rodrigo, Marqués de Posa), Alexei Tanovitski (El Gran Inquisidor), Lucas Debevec Mayer (Un monje), Marisú Pavón (Una voz del cielo), Iván Maier (El Conde de Lerma), Darío Leoncini (Un heraldo real). Orquesta y Coro Estables del Teatro Colón. Director de coro: Miguel Martínez.
Es tal la identificación del drama de Friedrich Schiller con la ópera de Giuseppe Verdi, que dan la impresión de haber nacido juntas. Sin embargo, la primera edición de Dom Karlos, Infant von Spanien tuvo lugar en 1787, el mismo año, por ejemplo, del estreno del Don Giovanni mozartiano. El desaguisado histórico que crea Schiller a partir de las figuras de Felipe II y su hijo, el infante Carlos de Austria, enfrentados sentimentalmente por el amor de una mujer y políticamente por los ideales libertarios del príncipe, si bien fue concebido en un contexto y un tiempo histórico bien diferente al de 1867, resultó el sustrato ideal para que Verdi enviara un mensaje de libertad en momentos cruciales para la emancipación del yugo austríaco y la unificación de Italia. Por extraño que parezca, el universo musical que acompañó la escritura y publicación de la obra de Schiller no eran los ecos heroicos de los coros nacionalistas de I lombardi o Nabucco de Verdi, ni siquiera la Novena Sinfonía de Ludwig van Beethoven |